Es fundamental enseñar a los peques a cuidar la boca desde bien temprano. Es necesario enseñarles a no adquirir malos hábitos que lo único que consiguen es dañar sus dientes. El mejor ejemplo ¡claro está! es el de los más mayores.
Aunque parezca mentira el cuidado de la boca no solo está en prevenir las caries, es necesario prevenir problemas en los dientes desde el minuto uno, ya que mejor prevenir que curar.
Por ello es necesario eliminar malos hábitos, tanto en los niños como en los padres y ser constantes en la higiene diaria. En Peláez y Blanco ponemos especial cuidado en los dientes de los niños a través de la odontopediatría, ocupándonos de su salud bucodental desde que son bebés hasta su adolescencia.
¿Cómo mantenemos la salud bucal de los niños? Entre otras cosas, una fundamental es evitar malos hábitos. Pero ¿Cuáles son?
Mala higiene dental
Si no se cepillan los dientes después de las comidas o realizan una limpieza rápida e incompleta puede que aparezcan las odiadas caries. ¿Por qué? Porque de esa manera el azúcar permanece mucho tiempo en la boca.
No debemos olvidar la higiene de los bebés, puesto que desde que comienzan a salir los primeros dientes, sobre los seis meses de edad tras la ingesta del biberón o el pecho se deberán limpiar con una gasa humedecida. Por otra parte también existen cepillos especiales para los primeros dientes así como pastas específicas.
Chuparse el dedo
El dedo hace una constante presión en la arcada dentaria lo que provoca un estrechamiento del paladar, si el hábito no se prolonga mucho en el tiempo, el paladar recuperará su forma de manera natural. En el caso de que el niño continúe chupándose el dedo una vez pasado los cuatro años de edad, las probabilidades de que necesite ortodoncia aumenten drásticamente.
Un consumo excesivo de azúcares
Ingerir azúcares refinados y alimentos muy ácidos, resulta negativo para la salud de los dientes. Si se consumen tener la precaución de cepillar los dientes justo después de su ingesta.
Comida triturada
La acción de morder representa un estímulo para nuestra encía. Estamos entrenando los músculos de la cara y de la lengua. Por esa razón si se empieza a dar alimentos sólidos a los niños demasiado tarde puede ser contraproducente para el buen desarrollo de su boca y de los maxilares, aumentando del mismo modo la necesidad de llevar ortodoncia en el futuro.
No olvidéis que en Peláez y Blanco contamos con una ayuda extra y que Claudiño muchas veces nos echa una mano para enseñar a los niños la importancia del cuidado de los dientes desde bien pronto.
Y como toda ayuda es poca también contamos con PADIEx, el Plan de Asistencia Dental Infantil de Extremadura, que precisamente su objetivo es el de prevenir y cuidar la salud oral de los niños.
Si no recuerdas en qué consiste PADIEx consulta nuestra web.
Si aún te quedan dudas sobre la salud bucodental de los niños, contacta con nosotros y te ayudaremos.